Microplásticos y fertilidad
Estudios demuestran que todos los humanos tenemos microplásticos, incluso se han detectado en las placentas y testículos. ¿Cómo llegaron ahí? ¿Cómo nos afectan? ¿Qué podemos hacer para protegernos? El Dr. Arturo Valdés, experto en Fertilidad, el Dr. Carlos Monsalve especialista en Cuidado Materno Fetal y la Mtra. Marisol Navarrete, nutrióloga clínica nos explican todo lo que hay que saber, recuerda que #SaberEsPoder
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Introducción
Hace un par de meses en mayo del 2024, la Universidad de Oxford publicó un estudio en el que en resumidas cuentas, estudiaron los testículos de 23 hombres, así como 47 perritos y lamentablemente, en todos y cada uno encontraron microplásticos. De igual forma, en febrero de este año en la Universidad de Nuevo México, estudiaron 62 placentas humanas y en todas se encontraron microplásticos.
Y ¿Cómo llegan estos microplásticos a nuestro cuerpo? Una parte es basura que se va desgastando poco a poco y termina siendo consumida por animales o absorbida por las plantas, en algunos casos los rayos ultravioleta causan un desgaste tan pequeño que las partículas terminan flotando en el aire y podemos respirarlas, sin embargo, la gran mayoría de los microplásticos vienen directamente del agua que consumimos. Los tinacos, las tuberías de tu casa, los garrafones y las botellas de agua están hechas de plástico y a nivel microscópico se desgastan y descaman fácilmente, toda esa agua entra a nuestro cuerpo acarreando los microplásticos.
Entonces, en este video queremos explicarles un poco sobre cómo nos afectan los microplásticos, cómo podemos detectarlos y qué precauciones debemos de tomar para proteger no solo la fertilidad sino también la vida. Recuerden que saber es poder.
¿De qué forma nos afectan los microplásticos?
Comenzando desde el punto de vista de la fertilidad, es un hecho que la cantidad de espermatozoides que un hombre produce ha disminuido en los últimos 50 años. Es muy probable que esta disminución haya comenzado desde algunas décadas antes, pero hace siglos no había la posibilidad de analizar y contar los espermas con microscopios de alta potencia.
El primer estudio sobre la disminución del conteo espermático se publicó en 1974 y desde entonces se han realizado muchos más estudios, sin embargo, aún no se ha podido determinar una causa exacta de la disminución. Seguramente la contaminación así como fumar, beber y tener sobrepeso tuvieron o han tenido un papel importante inicialmente pero actualmente el principal sospechoso es un químico llamado: Bisfenol-A o BPA. El Bisfenol-A es un químico que se utiliza para recubrir la parte interna de las latas de comida y bebidas enlatadas, aunque también se usa en la producción de diversos plásticos y es tan abundante que se ha detectado en el 90% de las muestras de orina de diversos estudios.
El problema es que el BPA altera la función endocrina de nuestro cuerpo, explicado en palabras simples, sucede que nuestro cuerpo confunde al BPA con el estrógeno y el estrógeno es una hormona que ayuda a modular la maduración de los espermatozoides. Nuestro cuerpo piensa que tenemos demasiado estrógeno, así que deja de liberar estrógeno y no hay espermas maduros.
Usualmente entre más BPA se detecta, menos espermas se producen y tienen una menor movilidad, afortunadamente la morfología no se afecta y no parece haber daños a la calidad del DNA u otros parámetros que incrementen el riesgo de aborto o defectos congénitos, por tanto, es más difícil lograr una embarazo pero si se logra el bebé debería estar sano.
Microplásticos en la placenta o durante el embarazo
Ahora bien… ¿Qué pasa con los microplásticos en la placenta de la madre? Técnicamente es algo bueno que la placenta tenga microplásticos ya que está funcionando como filtro para evitar que lleguen al bebé, de hecho se han analizado las heces de los bebés para determinar cuántos plásticos tienen y se trata de una cantidad mínima cuando son recién nacidos. Su exposición el plástico comienza cuando usan chupones, mamilas, ropas, mantas o telas hechas de fibras sintéticas y claro, cuando empiezan a meterse a la boca todo lo que encuentran a su alrededor.
Entonces, no se preocupen por los plásticos durante el embarazo, hay que cuidarlo bien una vez que nace. Es importante destacar que esta recomendación o análisis es válida para este momento, el año 2024, porque las cantidades de microplásticos aún son pequeñas, lamentablemente cada año se van incrementando y sabemos, por experimentos realizados en ratas hace décadas, que altas concentraciones de plástico tienden a producir cáncer y fallas en diversos órganos.
¿Debo hacerme estudios para detectar microplásticos?
En cuanto a fertilidad, en teoría podemos hacer biopsias y análisis de orina para detectar si tú tienes microplásticos pero no tiene mucho caso porque lo más seguro es que siempre vamos a detectarlos… Vivimos en un mundo fabricado de plástico. Entonces, la idea no es realizar estudios para detectar los microplásticos sino que haríamos estudios para detectar si te están afectando.
El primer paso, especialmente si ya llevan más de 6 meses intentando un embarazo sin éxito, sería realizar un seminograma. Afortunadamente en la gran mayoría de los casos si hay pocos espermas podemos regular su producción y motilidad con medicamentos, adicionalmente se recomendaría abstenerse totalmente de comidas enlatadas y bebidas embotelladas en plástico, por lo menos hasta lograr el embarazo.
Recomendaciones para evitar o reducir los microplásticos
¿Qué otras precauciones podemos tomar? Incluso si no están buscando un embarazo les damos las siguientes recomendaciones:
- Evita utilizar cubiertos platos o vasos de este material.
- Te recomendamos calentar tus alimentos en recipientes de vidrio y si estos tienen tapa de plástico es mejor retirarla.
- Por favor nunca calienten recipientes de plástico en el microondas, el calor degrada los plásticos y sus alimentos se van a contaminar.
- Evita cocinar con utensilios de plástico y mejor utiliza de silicón que resisten altas temperaturas.
- De igual forma, existen estas bolsas de silicón reutilizables que son mucho mejor opción que las de plástico.
- Si tienes que darle biberón a tu bebé es recomendable calentar la leche o fórmula en una olla de metal o vidrio, permitir que se enfríe un poco y luego verterla al biberón.
- Evita utilizar tablas de cortar hechas de plástico.
- Si tienes muebles de plástico o tapizados con fibras sintéticas es recomendable evitar exponerlos al sol.
- Si andas cargando a todos lados una botella de agua procura que sea de vidrio o de metal libre de BPA.
- De ser posible evita sartenes recubiertos de teflón, busca uno de hierro fundido.
- Procura que los bebés y niños pasen más tiempo fuera de casa, lamentablemente las casas están llenas de materiales sintéticos.
- Aspira tu casa seguido y en vez de usar un sacudidor utiliza una tela húmeda para eliminar el polvo en repisas y muebles.
- Es preferible comprar ropa de fibras naturales, especialmente bufandas, gorros o las fundas de almohadas, es decir, materiales que se aproximan mucho al rostro y cuyas partículas podríamos inhalar.
- Reduce tu consumo de proteínas procesadas como jamón, salchicha y nuggets de pollo, en general, entre más procesado esté un alimento, más plástico contiene.
Conclusiones
Por el momento eso es todo lo que podemos recomendarles, en general, la idea es reducir la cantidad de plástico que entra a nuestros hogares y evitar que dichos plásticos se calienten o se expongan al sol.
Quizá así como hoy en día consumimos probióticos para mejorar nuestra flora intestinal algún día podamos consumir antiplásticos porque de hecho ya descubrieron algunas bacterias que desintegran plásticos pero aún estamos muy lejos de ese sueño, por el momento la mejor opción es ser conscientes de que este es un problema real y debemos tomar algunas precauciones.