¿Estoy de parto? Síntomas, mitos y falsas alarmas
El Dr. Carlos Monsalve, experto en cuidado materno de Creafam, nos enseña a identificar las señales de un verdadero trabajo de parto, aclarando algunos mitos y consejos para el 8º mes del embarazo.
Antes de comenzar recuerden que la primera recomendación es tomar un curso de preparación al nacimiento.
Introducción
Algo que le sucede a muchas mamás primerizas es que justo cuando empieza el octavo mes, como que de repente hace algo click y se dan cuenta de que ya falta muy poquito para el parto, entonces toda la emoción y alegría del embarazo se convierte en ansiedad. Cualquier dolorcito o sensación extraña les hace pensar que ya están en labor de parto. Por favor, respiren profundo. Vamos poco a poco y vamos a ver las señales más claras para identificar un verdadero trabajo de parto. Recuerden que #SaberEsPoder.
Seguramente su médico ya les ha dado una fecha de parto calculada, si no la tienen el primer paso sería entrar a la página de creafam.com/calculadora y anotar su fecha de última regla para que así sepan la fecha del parto. Aún cuando sólo el 5% de las mujeres dan a luz a las 40 semanas exactas, tener esta fecha les dará una idea clara de más o menos cuándo llegará su bebé.
Síntoma 1: Posición del bebé
Alrededor de la semana 36 el bebé adopta una posición boca abajo y su cabeza se encaja en la pélvis de la madre, una vez que adopta esta posición todo está listo para desencadenar el trabajo de parto, sin embargo, es importante saber que si el bebé ya está boca abajo antes de la semana 36 no significa que ya vaya a nacer. A lo largo del embarazo el bebé se va a mover y cambiar de posición muchísimo pero llegando a la semana 36 se va a quedar ya en esa posición… En la posición que esté, lo ideal es que sea boca abajo y ya no va a cambiar de posición. Ahora bien ¿Cómo saber si ya está en posición? Bueno, pues usualmente las mamitas afirman que de repente pueden respirar un poco más fácil o que pueden sentir como que su bebé se encajó en la parte inferior de la pélvis, algunas mamás pueden comenzar a sentir breves piquetes o pinchazos en la vagina, a algunas les da la sensación de como que se quiere salir el bebé. Esto lo van a sentir especialmente cuando caminan o cuando están mucho tiempo de pie, pero como médico, evidentemente yo les recomendaría realizar un ultrasonido para confirmar que el bebito está bien colocado.
Si ya pasa de la semana 36 y el bebé todavía no está boca abajo, es muy poco probable que se pueda volver a girar, entonces lo más seguro es que el bebé ya se mantenga en esa posición de ahí hasta que nazca, entonces, tenemos que estar preparados para un parto de nalgas que actualmente no es lo recomendado, lo recomendado sería que naciera por vía cesárea.
Síntoma 2: El tapón mucoso
Síntoma número 2: Expulsión del tapón mucoso. Durante el embarazo, el cuello uterino se recubre por una capa mucosa, esta capa aísla el interior del útero protegiéndolo de infecciones y cualquier elemento nocivo. Cada mujer es única y en algunas es una capa muy gruesa y densa, en otras es un poco más delgada y liviana, pero si en el último mes del embarazo notan que expulsan un poco de moco, probablemente se trata de este tapón que se libera para preparar el canal de parto, no se preocupen el cuello uterino va a seguir completamente cerrado algunos días más. Incluso hay muchas mamás que nunca notan este síntoma porque les sucede justo cuando se están duchando o cuando van al baño o hasta el día del parto.
Síntoma 3: Contracciones
Síntoma número 3: Contracciones. Las contracciones uterinas son una de las señales más conocidas del trabajo de parto pero también es uno de los síntomas que más fácilmente puede confundirse con otro tipo de contracciones llamadas “Contracciones de Braxton Hicks”. Las contracciones de Braxton Hicks pueden aparecer desde el principio del tercer trimestre, se siente que la panza se pone dura, muy dura, especialmente en la parte baja del abdomen quizás como un calambre o un cólico.
Estas contracciones falsas pueden durar bastante tiempo pero sólo ocurren de forma esporádica y no hay que alarmarse, se trata del útero ejercitándose y preparándose para dar a luz. Las verdaderas contracciones del parto no se sienten solo en la parte baja del abdomen sino que irradian hacia la espalda y piernas, envuelven toda la panza que se pone tan dura como la frente. Al principio duran poco tiempo, unos 5 o 10 segundos quizás 20 a lo mucho, pero poco a poco van durando más y el periodo entre una y otra contracción también se hace más corto. Al principio puede sentirse una o dos por hora, cuando ya se siente una cada diez minutos o el dolor sea muy intenso es momento de acudir a valoración con su ginecólogo.
Síntoma 4: Ruptura de la fuente
Síntoma número 4: Ruptura de la fuente. Gracias a las películas y series de televisión, la gran mayoría estamos familiarizados con ese momento en que de repente sale un chorro de líquido y ¡Listo! La mamá y todo el mundo a su alrededor se dan cuenta de que ha llegado el momento del parto, pero en la vida real no siempre es algo tan evidente. Usualmente la ruptura de membranas ocurre durante el trabajo de parto pero en algunas ocasiones puede presentarse antes de este periodo y esta sería una indicación para realizar una inducción del parto.
Lo más común es que la membrana tenga una ruptura brusca, es decir, se revienta como un globo y se mojan hasta los tobillos pero en otras ocasiones la ruptura es alta y se puede confundir con un flujo o un manchado.
Por eso mamis, como ya he dicho en varios videos, ningún flujo sangrado es normal durante el embarazo. A partir del octavo mes, si llegan a tener un flujo transparente y constante, incluso si es muy leve, existe la posibilidad de que se hayan roto las membranas uterinas y que este flujo en realidad sea líquido amniótico que está escapándose del útero. Si notan salida del líquido de forma continua o que ya llevan un par de días que aparece y desaparece hay que acudir a consulta de inmediato.
Con una cristalografía, que es un estudio en el que se deja secar el líquido y lo observamos con el microscopio, podemos confirmar si se trata de líquido amniótico, de ser así, es posible que ya se haya iniciado el trabajo de parto o que debamos inducirlo, no se preocupen, en Creafam están en buenas manos.
La mejor forma de prevenir partos prematuros y rupturas tempranas de membranas, es decir, una ruptura antes de la semana 37 del embarazo es evitar las infecciones. Recuerden que el examen general de orina es un estudio sencillo y económico que se debe realizar de forma regular y si se detecta alguna infección hay que combatirla siguiendo las indicaciones del médico al pie de la letra.
Síntoma 5: Dilatación del cuello uterino
A lo largo del embarazo el cuello del útero se cierra completamente, pero al momento del parto comienza a dilatarse o abrirse. Usualmente el doctor realiza un tacto vaginal para medir la dilatación, cuando esta dilatación tiene tres centímetros afirmamos que la mamá está en labor de parto, aunque todavía tenemos un poco de tiempo. El cuello se dilata un centímetro por hora más o menos y si la mamá desea recibir la anestesia, es decir, una epidural a partir de los 3-4 centímetros de dilatación ya podría colocarse, valorando el dolor que sienta cada paciente.
Algunos mitos sobre el parto
Ahora que ya hemos visto los síntomas del trabajo de parto quiero aprovechar para aclarar algunos mitos con respecto a la labor de parto.
- ¿Si llego al hospital y es una falsa alarma van a sacar a mi bebé a la fuerza? No, claro que no, tranquilas. Si llegas al hospital y es una falsa alarma ¡No pasa nada! Te van a revisar y mediante el tacto vaginal podemos determinar si ya estás entrando en trabajo de parto o no. ¿Qué es el tacto vaginal? Con el tacto vaginal vamos a revisar el cuello uterino, cuando todavía no hay trabajo de parto se va a sentir muy largo, se va a sentir hacia la parte trasera y va a estar muy duro, cuando ya empezaste el trabajo de parto, ese cuello se va a hacer blandito y va a empezar la dilatación y se va a hacer central, entonces ahí podemos determinar en qué momento iniciarás tu trabajo de parto.
- ¿Existen masajes, ejercicios o técnicas para que el bebé cambie de posición? Ok, actualmente se recomienda solamente ciertos ejercicios, ciertas posiciones de la mamá, es decir, ponerse en posición de gateo ayuda muchas veces a que el bebé cambie de posición. Lo que ya no está nada indicado son las versiones externas, lo que antiguamente hacían las matronas: Mover al bebé para tratar de acomodarlo de cabeza cuando en realidad estaba sentado, eso ya está actualmente prohibido y no dejen hacerse ese tipo de maniobras.
- ¿Puedo inducir el parto si ya llegué a las 40 semanas? Si se puede inducir pero personalizando a cada paciente, porque habrán mujeres que estén en condiciones de inducción y habrán mujeres que no estén en condiciones de inducción. ¿De qué va a depender? De cómo se encuentre clínicamente ella, cómo se encuentra el bebé y muy importante: Como se encuentra el cuello uterino para ver si realmente va a funcionar o no va a funcionar la inducción, esta valoración la hará su ginecólogo mediante un tacto. Hay otras formas de inducir un parto de forma natural. Una sería la estimulación de pezón, al estimularse ustedes sus pezones, van a liberar la hormona de la oxitocina, que es la encargada de provocar contracciones, entonces llegando a la semana 38, 39, 40 pudieran empezar con este tipo de ejercicios para favorecer a la inducción del parto de forma natural. Hay otros mitos como es comer comida picante, no necesariamente va a inducir el parto. Las relaciones sexuales pudieran inducirlo pero no es lo recomendable ¿Por qué? Porque puede provocar una ruptura prematura de membranas. El ejercicio es algo natural, salirse a caminar, salirse a hacer un poquito de ejercicio puede favorecer a esas contracciones.
- ¿Cómo evitar una episiotomía? La episiotomía es el corte que el ginecólogo tiene que hacer para ayudar al nacimiento del bebé ¿En qué momento se hace esta episiotomía? Este corte se realiza una vez que ya la cabecita está a punto de nacer es cuando llamamos que “Está coronando”. Hay ocasiones que la podemos evitar nosotros como ginecólogos haciendo ciertas maniobras, pero hay ocasiones en donde no se puede evitar y es mejor realizar una episiotomía a tener un desgarro.
- Como soy caderona mi parto va a ser fácil o viceversa. No se preocupen, lo importante no es si son caderonas o no. Claro, una mujer que tenga más cadera seguramente su pélvis será mayor y entonces podría tener un parto más sencillo, pero no siempre es así. Hay ocasiones en donde la mujer tiene una cadera más amplia y no es una buena pélvis para el nacimiento del bebé y también muchas veces va a depender del tamaño del bebé si es un bebé pequeño o es un bebé muy grande para la pélvis de cada mujer.
- ¿Debo realizar algo antes de ir al hospital? Si, hay ciertas cosas que sí se recomiendan para llegar al hospital. Uno es, si empezaron el trabajo de parto en casa, que su alimentación no haya sido con mucha grasa o con mucha harina, sobre todo para el momento de empujo que no vaya a haber un accidente mayor durante el nacimiento, entonces si se recomiendan los enemas para que esté más limpio su intestino para que al momento del nacimiento no se vaya a contaminar su bebé. El rasurado, el rasurado es algo opcional, no es necesario, no es indispensable aunque sí es muy bueno para el momento del nacimiento del bebé, poder realizar, si se realiza un corte que esté todo más limpio y preparado para ese corte. 15 días antes de la fecha calculada de nacimiento yo les recomendaría acudir al hospital, sobre todo para que les digan qué papeles tienen que llevar, que no les agarren las prisas y tener una maleta preparada en el coche para que no les agarren tampoco las prisas.