Lactancia materna

La leche materna es el alimento perfecto para el bebé.

Se recomienda amamantar de manera exclusiva durante los primeros 6 meses de vida y mantenerlo hasta al menos cumplir un año aunque se hayan introducido otros alimentos.

La leche materna tiene la cantidad adecuada de nutrientes como proteínas, grasas, vitaminas y minerales que requiere el bebe durante esta etapa de su vida, además de un conjunto de anticuerpos que lo van a proteger contra ciertas enfermedades. Por otra parte es más fácil de digerir que la fórmula infantil, por lo cual los bebes que se alimentan con leche materna suelen tener menos gases, cólicos o estreñimiento.

La lactancia materna tiene una serie de beneficios para la madre.

Al amamantar se libera la hormona oxitocina, que induce la contracción del útero, lo cual acelera que vuelva a su tamaño normal y disminuye el sangrado posterior al parto. También contribuye a disminuir el peso que se aumentó durante el embarazo y hay estudios que señalan un factor de protección contra cáncer de mama y ovario en las mujeres que dieron lactancia materna.

  • Amamantar es un proceso natural donde madre y bebe se van a ir acoplando poco a poco.

  • Es importante permitir al bebé ir estableciendo su horario, e ir aprendiendo a reconocer el momento cuando quiere alimentarse (no necesariamente tiene que llorar).

  • La capacidad del estómago al inicio es de aproximadamente media onza y que se vacía rápidamente, por lo cual durante las primeras semanas de vida la mayoría de los bebés se alimentar 8 a 12 veces en 24 horas. Estos períodos de tiempo se van espaciando en la medida que la leche aumenta su tenor de grasa y lo llena por más tiempo, hasta establecer horarios de 3-4 horas entre cada alimentación.

  • Es importante mantener una alimentación balanceada acompañada de abundantes líquidos para producir leche suficiente.

  • Se estima un requerimiento de aproximadamente 450 calorías adicionales durante este período, por lo cual se debe llega a unas 2500 calorías ingeridas al día.

  • La mejor forma de garantizar el suministro de líquidos es tomar uno a tres vasos de agua cada vez que amamante.

La leche materna es lo más natural.

“Pueden aparecer dudas durante esta etapa, pero es importante recordar que se trata de un proceso natural y como tal debe ser abordado a pesar de las múltiples exigencias que nos impone la vida moderna”

Mtra. Marisol Navarrete
Mtra. Marisol Navarrete
Nutrición y Lactancia

Maestría en Nutrición Clínica.
Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla.

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