Varicocele es el nombre que recibe una variación anatómica de las venas del escroto que se encuentran dilatadas.

Afecta aproximadamente al 15 % de todos los hombres y se suele diagnosticar por examen clínico. Algunas veces el diagnostico se realiza por ultrasonido, en cuyo caso se denomina varicocele subclínico. Es más frecuente del lado izquierdo, pudiendo ser bilateral.

En la mayoría de los hombres no tiene implicaciones clínicas, pudiendo producir dolor local en menos del 5% de los casos.

Menos de la mitad de los hombres con varicocele tienen reducción en el conteo y/o en la motilidad de los espermatozoides que puede comprometer su potencial reproductivo. Esto se ha relacionado con aumento de temperatura local como consecuencia del remanso de sangre que se genera por la dilatación de las venas.

Los hombres que experimentan dolor asociado al varicocele pueden considerar ir a tratamiento quirúrgico para corregirlo, lo mismo que aquellos con infertilidad y parámetros seminales alterados. Aquello con parámetros seminales normales no requieren ir a tratamiento.

Si bien la cirugía de varicocele raramente tiene complicaciones, pueden presentarse casos de sangrado, infecciones, lesiones testiculares o los derivados de la anestesia.

Alrededor del 10-15% de los hombres que se someten a la cirugía tienen recurrencia o persistencia del varicocele después de la cirugía.

“En la gran mayoría de los casos de parejas que consultan por infertilidad, donde el hombre presenta varicocele, estos suelen tener una calidad seminal que permite realizar algún tratamiento de reproducción asistida (inseminación intrauterina o fecundación in vitro) sin necesidad de recurrir a la cirugía, por lo cual su realización se sugiere en caso de presentar dolor local o en varicoceles muy desarrollados posterior a lograr el embarazo.”

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