Miomatosis uterina
Junto con la endometriosis los miomas son uno de los problemas principales en la mujer en edad reproductiva con los tumores benignos de útero (leiomiomatosis y/o miomatosis) los cuales se presentan en cerca del 30-35% de la población en edad reproductiva. Estos tumores son benignos en el 99% de los casos y sólo un 0.5-1% pueden transformarse a malignos (sarcoma uterino).
Afortunadamente la miomatosis uterina no siempre es un problema que necesite necesariamente de una cirugía. Sin embargo; estos tumores uterino benignos pueden causar síntomas en la mujer que le causen problemas en su vida cotidiana, entre los más frecuentes:
Detección y control
Es muy importante que una vez iniciada la vida sexual se realice al menos un control de ultrasonido endovaginal para valorar el útero y los anexos (Fig. 1). Ya que con este simple examen de gabinete podremos detectar la gran mayoría de estos miomas.
En una primera visita ginecológica normalmente detectamos si existen miomas, cuantos son, el tamaño, la localización y con un interrogatorio médico dirigido si existen síntomas que lo acompañen. La importancia o la implicación médico quirúrgica depende tanto del tamaño del mismo, del número de los miomas,, la localización es fundamental y si se acompaña de hemorragias o afecta a la fertilidad principalmente. En algunas ocasiones es necesario un estudio integral complementario como la histerosonografía (introducir solución en la cavidad uterina).
La clasificación de los miomas depende de su localización siendo estos los siguientes Fig. 3:
El abordaje para la cirugía de miomatosis depende de su localización pudiendo ser por vía vaginal (mioma submucoso) con histeroscopía quirúrgica, abdominal que a su vez puede ser vía laparoscópica y/o con minilaparatomía.